Dos días después de todo lo acontecido el Domingo de Corpus Christi, precioso epílogo a una semana de las más importantes de la historia de nuestra Hermandad, la junta de gobierno desea lanzar un mensaje de agradecimiento a todos los que lo han hecho posible.

Comenzamos por el clero almeriense, desde el Señor Obispo, monseñor don Antonio Gómez Cantero, hasta nuestro consiliario el Rvdo, don Juan Antonio Moya Sánchez, pasando por don Juan José Martín Campos, delegado episcopal para las hermandades y cofradías, piezas clave para que la Hermandad cumpliera uno de sus anhelos históricos. También, a los sacerdotes que acompañaron a nuestro paso de misterio en sus traslados y visitaron y alabaron el altar dispuesto en la Puerta Purchena, así como a don Ramón Garrido Domene, que nos deleitó el viernes con una excepcional Exaltación Eucarística, acompañado por el angelical coro Pedro de Mena de Adra. La intención de nuestra Hermandad siempre fue aportar un granito de arena para realzar la Solemnidad del Corpus Christi, centrada en todo momento en Su Divina Majestad, y así creemos que ha sucedido.

También damos las gracias al Ayuntamiento de Almería, encabezado por su alcalde don Ramón Fernández-Pacheco, quien puso todas las facilidades para los distintos traslados de la Hermandad así como para el montaje del altar en la Puerta Purchena. El mismo día del Corpus, al mediodía y a pesar de sus obligaciones electorales, el señor alcalde depositó una ofrenda floral en el paso de la Santa Cena junto con N.H.D. Carlos Sánchez, concejal de promoción turística de la ciudad.

A las hermandades que nos acompañaron o ayudaron a crear una atmósfera única en torno al paso de la Santa Cena, tanto en sus traslados como en el altar. Gracias a las hermandades del Gran Poder, la Soledad, los Estudiantes, las Angustias, el Silencio, el Paso Morado de Huércal Overa y la Redención de Sevilla por la cesión de algunos de los enseres más preciados de su patrimonio. Gracias a las hermandades sacramentales de la ciudad por acompañarnos en el traslado de vuelta. Gracias a todos los cofrades de Almería por arroparnos en un día histórico, especialmente a aquellos que dejaron y dejarán documentación visual de este hito. Especialmente agradecidos a la junta de gobierno de la Agrupación de Hermandades y Cofradías, encabezada por don Isaac Vilches Marín, canalizadora de un proyecto ilusionante que cristalizó este 19 de junio de 2022.

La Hermandad quiere expresar un agradecimiento especial al cuarteto vocal Anacrusa, que contribuyó a crear una atmósfera única en el traslado de ida a la Puerta Purchena entonando cánticos eucarísticos, así como en el tercer día del Triduo. También, como no, a la Banda de Cornetas y Tambores Nuestra Señora del Carmen, nuestra banda, que sonó a un nivel sobresaliente tras el paso de misterio. La nota musical fue completada por la soprano Lelia Casquet, que participó el jueves en los cultos. También a la Floristería Gracia y la Penca, que fue capaz de conformar un exorno floral único e inspirado en el Corpus Christi que sorprendió a propios y extraños.

El mayor agradecimiento a todos los hermanos y devotos del Señor, que participaron o arroparon a su titular tanto en los cultos como en los traslados, así como en su estancia en la Puerta Purchena. Mención especial para el ya asentado cuerpo de acólitos de la Hermandad, para los 120 costaleros que conformaron tres cuadrillas comprometidas con su titular, para la Juventud de la Cena que vivió estos días con una ilusión indescriptible y, sobre todo, para los integrantes de un equipo de priostía que ha echado el resto en las últimas semanas, con resultados palpables y espectaculares, asumiendo importantes retos para el mayor realce del Señor de la Santa Cena.

La Hermandad aprovecha para recordar a sus hermanos que ellos son el motor de la corporación y que de ellos depende nuestro crecimiento y futuro, y también para abrir las puertas de nuestra casa a todos los almerienses. Gracias a todos ellos por hacer posible que el Corpus Christi 2022 no se olvide jamás en esta casa.

Adoremos in Aeternum, Sanctissimun Sacramentum.

Alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar.