No tenemos excusa, no podemos atrasarlo más, no debemos posponerlo, porque es el momento, porque Él siempre nos está esperando, porque aunque no vayamos a verlo y rezarle, ahora, Él viene a nuestro encuentro.

El próximo Domingo, el Señor saldrá a buscarnos, quiere mirarnos a la cara a cada uno de nosotros, quiere estar más presente que nunca y debemos acogerlo y aclamarlo.

Somos los discípulos del S. XXI, este año, mostraremos simbólicamente, dónde y cuándo, Jesús, nos hizo el mayor regalo posible, la Eucaristía.

Tendremos delante, el Cenáculo, se expondrá la Última Cena del Señor, porque hace casi 2000 años….

Se reunió con sus amigos más íntimos, y sabiendo que lo iban a entregar, quiso celebrar una última cena con ellos, y hacerles el mayor regalo posible, entregarse en Cuerpo y Sangre, en las especies de pan y vino.

Veremos al Santísimo Sacramento, presente en el misterio de la Santa Cena, donde Jesús, se nos entregó, se rebajó a lavarnos los pies y nos exhortó que nos amáramos los unos a los otros, como Él lo hizo.

Seremos muy cobardes de espíritu, si no diésemos respuesta a Dios mismo, presente en cuerpo y sangre, en Corpus Christi.

Salgamos a la calle, tenemos que dar testimonio de fé, sin miedo, sin vergüenza, sabiendo que Jesús es hombre y Salvador.

¡¡¡Adoremos siempre al Santísimo Sacramento del Altar!!!

Manuel José Guerrero Amate

Vocal de cultos de la Hermandad