Fe y Caridad
La Sagrada Imagen de María Santísima de Fe y Caridad está gubiada en cedro por las manos del imaginero sevillano Luis Álvarez Duarte, y fue bendecida el 17 de marzo de 1990 en la Iglesia Parroquial de San Pedro para, poco después -el 8 de abril del mismo año-, formar parte por vez primera del cortejo de la Hermandad de la Santa Cena.
Es sin duda una obra de singular ternura y delicadeza. Se trata de una imagen de candelero para vestir, de estilo neobarroco; y tiene tallada la cabeza, el cuello, una pequeña parte de la región escapular, las manos y el comienzo de los antebrazos.
Su rostro, de inefable belleza, parece cobrar vida gracias a sus grandes ojos. Luce los consabidos aditamentos barrocos: lágrimas de cristal, que resbalan por sus correctas facciones. La recta nariz insiste en el clasicismo de las formas. La boca, de temblorosos labios, deja escapar un profundo suspiro. El hoyito de la barbilla acentúa el realismo expresivo de sus facciones. Y la perfecta conjunción de la cabeza con el cuello refuerza la delicadeza emocional de la efigie.
Representa el Misterio profundo del dolor corredentor de la Virgen María, que con sereno llorar y abriendo los brazos, acoge la maravillosa obra de su Hijo; llena de una Fe inmensa y una Caridad sin límite. “He aquí la esclava del Señor“.
La mano izquierda se aproxima al pecho, como acentuando la congoja de su corazón; pero la derecha va tendida hacia los fieles, brindando un pañuelo no para recoger sus lágrimas, sino para enjugar las nuestras.