Santa Cena
El apostolado que acompaña al Señor de la Santa Cena, tanto el Domingo de Ramos como el resto del año en la capilla del Baptisterio de San Pedro, es una obra íntegra también de José Antonio Navarro Arteaga, gubiada entre 1996 y 1999.
Muchos imagineros tienen mucho respeto a la hora de crear un misterio para este pasaje evangélico, pero el artista trianero superó la prueba de manera sobresaliente, creando un conjunto en el que los doce apóstoles y la imagen del Señor están interrelacionadas entre sí, con un movimiento sin igual, dando una fuerza a la escena pocas veces vista en la imaginería andaluza. Esta obra, entre otras muchas, le sirvió para confirmarse como uno de los imagineros más renombrados del panorama nacional.
Tanto es así, que Navarro Arteaga, a raíz de su obra para Almeria, ha sido requerido para realizar nuevos misterios de la Institución de la Eucaristía en otros puntos de España como Zaragoza o Salamanca.
Señor de la Santa Cena
La imagen del Señor de la Santa Cena es obra del imaginero sevillano José Antonio Navarro Arteaga, que comenzó a tallarla en 1996, aunque no fue bendecida hasta el 28 de febrero de 1999 por el Señor Obispo don Rosendo Álvarez Gastón, en la Iglesia Parroquial de San Pedro, sede canónica de la Hermandad. Fue presentada el 23 de enero del mismo año en la sevillana Iglesia de Los Terceros, sede de la Hermandad de la Sagrada Cena de la capital hispalense.
Apostolado
El apostolado que acompaña al Señor de la Santa Cena, tanto el Domingo de Ramos como el resto del año en la capilla del Baptisterio de San Pedro, es una obra íntegra también de José Antonio Navarro Arteaga, gubiada entre 1996 y 1999.
Muchos imagineros tienen mucho respeto a la hora de crear un misterio para este pasaje evangélico, pero el artista trianero superó la prueba de manera sobresaliente, creando un conjunto en el que los doce apóstoles y la imagen del Señor están interrelacionadas entre sí, con un movimiento sin igual, dando una fuerza a la escena pocas veces vista en la imaginería andaluza. Esta obra, entre otras muchas, le sirvió para confirmarse como uno de los imagineros más renombrados del panorama nacional.
Tanto es así, que Navarro Arteaga, a raíz de su obra para Almeria, ha sido requerido para realizar nuevos misterios de la Institución de la Eucaristía en otros puntos de España como Zaragoza o Salamanca.